BÚSQUEDA DE IDENTIDAD
El Palacio de la Luna de Paul Auster
(A unos días de su fallecimiento)
Mtra. Aurora Ruiz Vásquez
(Septiembre 1922-Abril 2016)
Paul Auster es un escritor estadunidense nacido en Nueva Jersey en 1947. En la rama austeriana encontramos: Leviatán, A salto de mata, La invención de la soledad, La triología de Nueva York, Fantasmas, entre otros. En el Palacio de la Luna, de rasgos autobiográficos, se confirma su inclinación por el azar, la casualidad, la identidad, las reflexiones sobre el enigma de la paternidad, así como el ambiente detectivesco y de misterio que envuelven las acciones de los personajes, en intrincados laberintos que recuerdan Las ruinas circulares de Jorge Luis Borges.
“Quien no conoce sus raíces, no sabe quién es, ni hacia dónde va” es una frase que describe a Marco Stanley Fogg, protagonistas de la novela. Fogg creció desarraigado en el Nueva York de los años sesenta, época en la que coinciden la llegada del hombre a la Luna y la guerra de Viet Nam. La luna juega un papel simbólico importante y de ahí, creo, se deriva el nombre de la novela. Usando lenguaje poético nos dice Auster en algún momento: “luego salió la luna por detrás de las colinas. Era una luna llena tan redonda y amarilla como una piedra incandescente.
El palacio de la luna es una novela bien narrada que se desarrolla, como ya dije, en la magia del azar, es intimista, enigmática y sorprendente. Hay pocos diálogos y muchas reflexiones. Los personajes son de los que dejan huella y se recuerdan. Se reflexiona además sobre la muerte.
El relato se mueve entre la ficción y lo biográfico, el camino que nos lleva de una historia a otra nunca termina. Dentro del desarrollo de la obra se presentan pasajes de tensión y dramatismo, historias ingeniosas que hábilmente se entrelazan unas dentro de otras y hechos fantásticos como el paraguas roto. Hay además monólogos de juegos de palabras que pretenden dar vida a cosas y hechos inexistentes e ilógicos como regalar dinero a manos llenas, aunque aquí, me parece, Auster se extiende demasiado en cuestiones increíbles.
El argumento de la obra consiste en relato que Marco Stanley Fogg hace de su vida con todo detalle.
No conoce a su padre, le dicen que murió antes que él naciera, más tarde muere su madre y queda a cargo de una hermana de ella, el excéntrico tío Víctor que tocaba el acordeón en lugares de mala muerte. Al cumplir 20 años muere su tío y queda en soledad.
Marco quiso “vivir milagrosamente” y se quedó en la indigencia al gastar su escasa fortuna. Una serie de peripecias pasa para sobrevivir, exponiéndose a los peligros de la calle, pero también suceden toda clase de incidentes inesperados a su favor: casualmente encontraba dinero, se lo regalaban o encontraba quien le ofreciera comida gratis, siempre por buena suerte.
La casualidad quiso que encontrara a una joven china, bailarina hermosa, llamada Kitty Wu que en alguna ocasión, junto con su amigo Zimmer, lo salvó de morir de hambre.
Más adelante Marco trabaja con el viejo egocéntrico y caprichoso Thomas Elfing quien fue pintor y hoy está ciego
y en silla de ruedas. Quiere que Marcos lo ayude a escribir su biografía para dejársela al hijo que no conocía. Con él encuentra casa y comida, pero soporta impertinencias, mal trato y órdenes extravagantes que le hacen la vida insoportable. Asume el encargo del viejo, de que a su muerte busque a Salomón, su hijo, para entregarle la autobiografía. Mientras este calvario sucede, Kitty Wu desea abortar y eso se convierte en motivo de rompimiento de la relación.
Marco se dedica a cumplir su misión, por fin encuentra a Salomón y por casualidad descubre que es su padre y que por lo tanto Effing su abuelo. El padre muere pronto en situaciones grotescas y él viaja a las costas del Pacífico.
El éxito de Paul Auster radica en aplicar la reflexión filosófica y el existencialismo a unos relatos cercanos al realismo mágico, la mezcla mantiene atrapado al lector hasta el final, satisfaciendo sus expectativas.
En mi opinión, El Palacio de la Luna de Paul Ausster, publicada por primera vez con el nombre de Moon Palace en 1989, vale la pena leerse para reflexionar sobre la existencia humana. Empezando la lectura no se quiere abandonar.
El Palacio de la Luna
Paul Auster
Traducción de Maribel De Juan